Los casos de personas que padecen conjuntivitis aumentan en Quintana Roo, reportando un incremento del 18% en la primera quincena de este 2024 comparado con la última quincena del 2023.
Los pacientes llegan a centros públicos y privados con síntomas de esta enfermedad. La mayoría refiere tener dolor en los ojos, ardor, lagañas e irritación en los mismos.
La Secretaría de Salud advirtió de este aumento no sólo en Quintana Roo, sino a nivel nacional, provocado por la época invernal.
Incluso, el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y los servicios estatales de salud recomiendan extremar las medidas de higiene para evitar infecciones en los ojos, que afectan principalmente a niñas y niños, incrementando la atención médica.
En Quintana Roo, los reportes oficiales señalan que los casos de conjuntivitis, en primera quincena de enero, alcanzan los 610, contra 515 que se reportaba en la última quincena de diciembre.
Los números de la primera quincena de 2024 superan también en 22% las cifras de la primera quincena de 2023, es decir, de hace un año.
La doctora Diana Aleida González Guajardo, adscrita a la Coordinación de Atención Integral en Segundo Nivel, dijo que la conjuntivitis viral y el herpes suelen ser las enfermedades oculares más comunes en esta temporada, siendo estas el primer motivo de consulta en el Seguro Social, ya que son altamente contagiosas.
Precisó que es necesario consultar al médico al presentar cualquier sensación de cuerpo extraño o basurita en los ojos, lagrimeo constante y enrojecimiento, además de secreción acuosa, comezón, ardor y, en algunos casos, molestia al exponerse a los rayos solares o luz artificial.
Consideró muy importante evitar la automedicación y seguir las indicaciones del especialista, pues en algunos casos la falta de cuidado provoca disminución de la agudeza visual.
En la mayoría de los casos, las conjuntivitis se acompañan de un cuadro de infecciones respiratorias, debido a que el agente causal suele ser el mismo.
Por ello, recomendó lavar constantemente las manos para evitar la propagación del virus; evitar saludar de mano o beso; no tallarse los ojos; cambiar frecuentemente la funda de la almohada o la toalla del baño, ya que el contacto con las secreciones favorece la propagación del virus.
