Fue el último pase de lista de José Juan Medina como policía en Durango capital. Lo despidieron sus compañeros de Seguridad Pública, después de que el viernes por la noche recibiera una pedrada que acabó con su vida.
La catedral basílica menor, momentos antes estaba repleta de familiares y amigos. La fotografía de José Juan era cargada por su familia, y también la cruz de su tumba. Los parientes y compañeros del policía se encaminaron hasta la carroza fúnebre.
Margarita, cuñada de José Juan, sabe que nada lo traerá de vuelta, sin embargo, pide justicia y que se cumpla el compromiso que se tiene para con los tres hijos que deja huérfanos.
Presuntos responsables son menores de edad
Por su parte, Marco Antonio Contreras, director de Seguridad Pública, dio a conocer que ya se encuentran declarando ante la Fiscalía General del Estado de Durango, jóvenes entre los 14 y 15 años de edad que cometieron el acto de arrojar piedras el viernes por la noche en la colonia Luz y Esperanza.
“Por las cuestiones de la edades no pueden estar en celdas. Vamos a fortalecer mucho el llamado a los padres de familia para saber qué es lo que están haciendo sus hijos, en saber dónde se juntan, que es lo que están consumiendo. Es un trabajo que vamos a hacer multidisciplinario para poner mano firme con los padres de familia”.
Recalcó que dentro del trabajo de campo en la colonia donde pasaron los hechos, los padres recalcan que ciertos jóvenes tienen problemas con la ingesta de sustancias tóxicas, incluso, por eso se dan este tipo de incidentes.
“Personalmente acudí y padres de familia recurren de ayuda porque sus hijos están consumiendo alguna droga a los 10 años, 12 años. Debemos de trabajar y tener la colaboración de los padres”.
Dijo que es necesario que los padres de familia se deben de acercar a las autoridades en las colonias donde existe un alto grado de consumo de sustancias tóxicas.
Por último, el alcalde de Durango, Antonio Ochoa, dio a conocer que se habrá de apoyar a la familia que del ex policía fallecido.
